El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, anunció que en los próximos días se desarrollará una Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), en Honduras, y advirtió sobre una «campaña de intrigas» que busca debilitar esta instancia regional.
En sus declaraciones, enfatizó la necesidad de que los países de la región se preparen para «antes, durante y después de esta cumbre histórica», que será liderada por la presidenta de Honduras, Xiomara Castro.
En este sentido, destacó el papel fundamental de Castro en el éxito de la CELAC. «Empeñémonos todas las regiones: suramericana, el Caribe, Centroamérica, México, porque la CELAC brille cada vez más», añadió.
El mandatario venezolano también expresó su deseo de que la CELAC evolucione «de un foro político a una organización de unión para la acción y para la liberación de todo un continente en este mundo multipolar, pluricéntrico que ha surgido».
En relación a la ALBA-TCP, Maduro subrayó que esta organización «quizá sea la última que no se queda en papeles escritos» y que ha generado «grandes resultados en el pasado».
Mencionó iniciativas como «la Misión Milagro, las misiones de salud, las de alfabetización y Petrocaribe» como ejemplos del impacto positivo de la ALBA-TCP en la región.
«Con la experiencia recabada y el espíritu que esto nos da, somos la única organización que nos planteamos, en concreto, grandes proyectos de desarrollo para cubrir las necesidades de nuestro pueblo: producir educación, ciencia, conocimiento, alimento; producir dignidad y unirnos cada vez más».
Concluyó el Jefe de Estado, haciendo un llamado a avanzar y ser «el gran motor que propugne una unión verdadera frente a los que conspiran contra toda la región».
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